El mundo policial desde el cine
Rosario Ayala analiza la película "Homicidio" de David Mamet, un retrato de la cultura judía, la cultura negra y la cultura policial.
22 May 2023
Por Rosario Ayala
Homicidio (Homicide) | 1991 | David Mamet
“¿Te gustaría conocer la naturaleza del mal?”
“No, hombre, porque entonces me quedaría sin trabajo”.
Bobby Gold, veterano detective de homicidios, investiga el caso de un narcotraficante negro, quien escapa matando a un policía tras un operativo fallido del FBI. En el medio de la investigación, Gold se encuentra ante otro crimen: una anciana judía, dueña de un comercio en un barrio predominantemente negro, fue asesinada a tiros, supuestamente por una fortuna escondida en su sótano.
A Gold, también de origen judío, le asignan el caso tras la presión de líderes influyentes de la comunidad. Mientras avanza entre las dos investigaciones, se enfrenta a su propia identidad tratando de entender qué significa ser policía, qué significa ser judío y si existe la posibilidad real de congeniar ambas pertenencias en una sociedad marcada por la paranoia, el cinismo y el odio racial, que no asume sus responsabilidades ni prescinde de sus miserias y atropellos
sistemáticos.
“Homicidio” es la tercera película del novelista, ensayista, dramaturgo y guionista estadounidense David Mamet. El film es un retrato de la cultura judía, la cultura negra y la cultura policial, las cuales allí se solapan y se desarrollan en contextos de permanentes violencias.
Mamet ganó como dramaturgo el premio Pulitzer por “Glengarry Glen Ross” en 1984 y entre sus principales guiones se encuentran “El cartero siempre llama dos veces” (1981), “El Veredicto” (1982) y “Los intocables” (1987), film dirigido por Brian De Palma y considerado como uno de los mejores guiones de los todos los tiempos.